7 may 2009

Flecha

De flecha

no tengo ni el filo de su borde

sólo minutos furtivos de algo etéreo

húmedo

casi fantasmal


soy veneno punzante

que te recorre por las noches

haciendo de ti un océano profundo

de fracasos tan míos


un simple copular en el silencio


he mellado tu angustia con un verbo

mientras tu codicia carnal

duele

a pesar de una láctea rigidez

que punza de placer en tus manos

duele.

5 comentarios:

Martín Gvevara dijo...

"soy veneno punzante"

Excelente !!!

"un simple copular en el silencio"

A do outro lado da xanela dijo...

Precisamente a causa de los placeres perdidos y recordados, duele.

Lástima de amnesia, en ocasiones.

Beso!

mharía vázquez benarroch dijo...

cómo pule la pluma usted poeta!!. un abrazo enorme.

Roy Jiménez Oreamuno dijo...

A veces el placer duele y duele profundamente y aún así las flechas muchas veces dan en el pleno corazón herido.
Saludos

mharía vázquez benarroch dijo...

Hoy te volví a leer, y me resonó este poema de Alejandro Salas...te lo dejo porque sé que te gustará:


Echatele encima poema, no la dejes tranquila`
ni sueltes su nuca ni sus nalgas
perfórala con tus yambos, marcha sobre ella y aplasta
su deseo horadando su lengua rota de lujuria
con tu ritmo inflexible
que ha de removerla por dentro
como si fuera músculo e instinto quien penetra
y la hace caer hacia la vida
que sean tus palabras como el fuego poema
así que adelante
no dejes de manosearla y caerle encima, que chille
hasta el cansancio.


Alejandro Salas, Venezuela 1960- 2003
de: Erotia, Editorial Mandorla